La habitación tiene un climatizador y televisión por satélite. La cama es super cómoda. El personal es agradable. El servicio es ejemplar. Las vistas son asombrosas. La cercanía de la parada de autobús facilitó visitar lugares de interés.

Nos ha gustado mogollón estar en esta propiedad. Nos alegramos de haberlo elegido, pasamos 11 noches soleados aquí. Lo más importante era el personal - son unas personas excepcionales y muy acogedoras. La habitación que nos dieron era enorme, y contaba con camas individuales, una caja fuerte y un balcón. Tenía un parking gratis cerca, un servicio ejemplar. Teníamos prisa y no probamos la piscina, aunque se veía climatizada. Una ubicación céntrica, a poca distancia de la Albufeira Beach. Además, estaba cerca de todo.

Las habitaciones con un baño bonito y una ducha estupenda y también sky tv.

La ubicación es excelente, a pocos minutos de la Iglesia de Sant'Ana, las camas son muy cómodas y el precio de la habitación es asequible.

Personal: no están dispuestos a entenderte, quieren que les pagues en metálico y antes de ver las habitaciones. No quieren dar factura. Además ven a los españoles como bichos raros. Instalaciones: son malísimas y nada confortables. Las camas unas muy duras y otras demasiado blandas. Las habitaciones son muy pequeñas y el cuarto de baño mini. La ducha no va bien. Limpieza: había polvo en los muebles y en el suelo arena y suciedad. Huele mucho a humedad en general. En la ducha hay que ponerse chanclas porque hay una alfombrilla dentro llena de hongos. Relación calidad/precio: no guarda relación, por un poco más hay hoteles mejores y estás cómodo. Desayuno: malísimo, mucho chorizo, yogurts de mala calidad, ubicación: está en un cerro para ir a la playa hay que bajar una cuesta y luego coger un ascensor o bien ir por unas rampas.

Su ubicación, está muy cerca del centro de Albufiera y de la playa.

El colchón es de muelles, y están tan usados que se te clavan por todo el cuerpo.Cuando lo comenté en recepción, no me hicieron caso, me contestó que ok. Todo el mobiliario es muy antiguo, tirando a cutre.Los domingos no hacen la cama, no cambian las toallas, ni limpian la habitación.

El desayuno es delicioso con mucha variedad de comida y este lugar tiene una ubicación práctica y cómoda cerca de la plaza del casco antiguo con vistas al mar, también está cerca de la Iglesia de Sant'Ana.

Personal: no están dispuestos a entenderte, quieren que les pagues en metálico y antes de ver las habitaciones. No quieren dar factura. Además ven a los españoles como bichos raros. Instalaciones: son malísimas y nada confortables. Las camas unas muy duras y otras demasiado blandas. Las habitaciones son muy pequeñas y el cuarto de baño mini. La ducha no va bien. Limpieza: había polvo en los muebles y en el suelo arena y suciedad. Huele mucho a humedad en general. En la ducha hay que ponerse chanclas porque hay una alfombrilla dentro llena de hongos. Relación calidad/precio: no guarda relación, por un poco más hay hoteles mejores y estás cómodo. Desayuno: malísimo, mucho chorizo, yogurts de mala calidad, ubicación: está en un cerro para ir a la playa hay que bajar una cuesta y luego coger un ascensor o bien ir por unas rampas.

Hotel muy limpio y barato. Habitaciones asequibles con balcón. Desayuno delicioso con excelente servicio. Ubicación cercana a la Plaza de la Ciudad Vieja y al centro de la ciudad y tiendas. Situado a poca distancia de la Plaza Vieja de Albufeira.

La ubicación, bastante cerca de la playa pero zona muy tranquila para descansar. El personal del hotel muy amable y dispuesto. El desayuno básico pero suficiente, muy buena relación calidad-precio en general. La habitación estaba limpia y hay un pequeño balcón con una mesa y sillas. Es un hotel sin lujos pero por el precio que tiene y con desayuno incluido no se puede pedir más.

Quizás el baño podrían hacerle alguna mejora, todo funcionaba bien pero más que nada por estética, modernizarlo un poco.

La habitación era enorme y tenía vistas al mar. El climatizador y la televisión por satélite fueron una agradable sorpresa. La ubicación era increíble y pude usar su parking gratis cerca.

Las habitaciones eran bien amplias y tenían un balcón para disfrutar del aire fresco. El personal que nos tocó fue súper amable y nos hizo sentir como en casa. Además, la ubicación era genial, cerca de una parada de autobús, así que era fácil moverse por aquí 🚌.

Las camas son geniales y la habitación cuenta con comodidades como climatizador, televisión por satélite y hervidor de agua; además, el edificio tiene un bonito estilo europeo con vistas agradables.

El desayuno aquí incluye yogur, tostada y zumo de naranja fresco.

Muy cerca del centro y de la playa, se puede ir andando sin coger el coche. Personal amable y atento.Habitación con hervidor y terraza.

Estaba como en casa, no me puedo quejar.